El 17 de octubre se conmemoró el septuagésimo aniversario del reconocimiento del derecho al voto de las mujeres en México, una fecha que marca un antes y un después en la historia política y social del país. En 1953, México dio un paso crucial al reconocer el derecho de las mujeres a participar activamente en el sistema democrático, permitiéndoles no solo votar sino también ser votadas.

Setenta años después, el impacto de esta decisión es evidente en todo el país. A nivel nacional, el poder político femenino ha crecido de manera significativa. México ha visto, por primera vez en su historia, a nueve mujeres asumir el cargo de gobernadoras simultáneamente, un reflejo palpable de la inclusión y representatividad femenina en puestos de alto nivel.

Algunos ejemplos destacados son:

  • En 2018, Claudia Sheinbaum Pardo hizo historia al ser elegida Jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
  • Lorena Cuéllar Cisneros y Layda Sansores, entre otras, representan el cambio generacional y de género en el liderazgo político.
  • Indira Vizcaíno, al rendir protesta como gobernadora de Colima, resaltó la necesidad de transparencia y justicia en la administración pública.

Estos avances en la política nacional son el resultado de décadas de lucha y activismo por parte de las mujeres mexicanas. Sin embargo, todavía existen retos. Perla Lizeth Bueno Torres, una defensora destacada de los derechos políticos y electorales, enfatiza que, aunque el derecho al voto se reconoció hace 70 años, muchas mujeres aún enfrentan barreras y formas de violencia política.

El aniversario del voto femenino en México no solo celebra el pasado, sino que también es un llamado al futuro. Es un recordatorio de que, aunque se han logrado avances significativos, aún queda un largo camino por recorrer para alcanzar una igualdad total en la política y en todos los aspectos de la sociedad mexicana.